lunes, 22 de octubre de 2012

Ozono troposférico y estratosférico.


Saludos Bloggeros! 

Ayer os mencioné que una de las partes que abordaba el informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), era reducir las exposiciones de los seres humanos, bosques y cultivos al ozono troposférico. No debéis confundir Ozono estratosférico con Ozono troposférico. Veremos las diferencias:

-Ozono estratosférico: Se llama así al Ozono que se encuentra en la estratosfera. Es ahí donde el Ozono debe de estar para no ser perjudicial para el ser humano.

-Ozono troposférico: Se llama así al Ozono que se encuentra en la troposfera. La troposfera es la primera capa de la atmósfera. Comienza en la superficie terrestre y continua hasta unos 20km sobre el nivel del mar. Es la zona donde tiene lugar la vida, y donde el Ozono, es considerado un contaminante, denominándolo también “Ozono Ambiental”

Bien, ahora que sabemos las diferencias entre ambos, vamos a ver por qué uno es perjudicial y el otro no.
Todos hemos oído hablar de la capa de Ozono y de los problemas que ha tenido años atrás. Tal y como os mencionó mi compañera, el Ozono estratosférico es el que forma la capa de Ozono en la estratosfera. Esta capa, lo que hace es neutralizar la radiación ultravioleta procedente del sol. Esta radiación ultravioleta, rompe las moléculas de O2 en dos átomos O + O.

Después, una molécula de O2 + O, forman la molécula de Ozono (O3)

Gracias a esta rotura y creación del ozono, las radiaciones UVA procedentes del sol se descomponen en esa capa y no pasan hacia la tierra, protegiéndonos de muchas patologías asociadas a ello, como el cáncer de piel.

¿Qué hay del Ozono troposférico? Ese sí supone un problema. En la troposfera no ocurre lo mismo que ocurre en la estratosfera.

El ozono troposférico penetra por las vías respiratorias y debido a sus propiedades altamente oxidantes provoca la irritación de las mucosas y los tejidos pulmonares. Los principales efectos observados son: irritación de los ojos, tos, dolor de cabeza, dolores en el pecho, etc. Pudiendo llegar, cuando las concentraciones son muy elevadas, a provocar inflamaciones pulmonares afectando gravemente a la función respiratoria.

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