miércoles, 24 de octubre de 2012

El mercurio en la salud



Hola bloggeros:

Hoy vamos a hablar de otra sustancia, que al igual que el plomo puede ser perjudicial para la salud: El mercurio. Como ya hemos dicho ayer, el ser humano no se percata de todos aquellos materiales nocivos que lo rodean y que en muchos casos son ingeridos de forma involuntaria.
El mercurio(Hg) puede ser encontrado de forma natural en el medio ambiente, en forma de líquido blanco-plateado y también puede encontrarse en forma de metal(en sales de mercurio o  mercurio orgánico).
El mercurio metálico se usa en interruptores eléctricos como material líquido de contacto, como fluido de trabajo en bombas de difusión en técnicas de vacío y en la manufactura de lámparas de vapor de mercurio. Por otra parte, el mercurio metálico es usado en una gran variedad de elementos que podemos encontrar en cualquier hogar, como termómetros, bombillas fluorescentes… El Mercurio en estos mecanismos está atrapado y usualmente no causa ningún problema de salud. En caso de rotura de alguno de estos objetos y una exposición al metal podría llegar a causar una serie de alteraciones en la salud.

El Mercurio no se encuentra de forma natural en los alimentos, pero de igual forma aparece en las cadenas alimentarias. Las concentraciones de Mercurio en los peces usualmente exceden en gran medida las concentraciones en el agua donde viven. Los productos de la cría de ganado pueden también contener eminentes cantidades de Mercurio. El Mercurio no es comúnmente encontrado en plantas, pero este puede entrar en los cuerpos humanos a través de vegetales y otros cultivos. Cuando aerosoles que contienen Mercurio son aplicados en la agricultura. Esta causa es la primera fuente de contaminación por mercurio que encontramos hoy en día.
La exposición puede causar efectos dañinos en los riñones, irritación en los pulmones, reacciones alérgicas, irritación en los ojos, vómitos, diarreas, irritación de la piel, cansancio, dolor de cabeza y puede causar efectos negativos en la reproducción, dañando al esperma y produciendo problemas en los nacimientos, abortos, etc. Pero las alteraciones más preocupantes causadas por este elemento químico se encuentran a nivel del sistema nervioso, en el ADN y cromosomas, siendo una causa para el desarrollo del mongolismo, y en las funciones del cerebro causando así la degradación de la habilidad para aprender, cambios en la personalidad, temblores, cambios en la visión, sordera, incoordinación de músculos y pérdida de la memoria.
 El cuerpo no se puede deshacer del mercurio, por lo tanto, éste se va acumulando paulatinamente en los tejidos. Con el tiempo, si no se trata, el envenenamiento por mercurio puede causar dolor, entumecimiento, músculos débiles, pérdida de la vista, parálisis e incluso la muerte.

 




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